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El 7D es la tecnología más avanzada en terapia HIFU y, por ello, es más popular que el HIFU tradicional. Sin embargo, existen otras consideraciones que inevitablemente llevarán a cada cliente a elegir el 7D en lugar de tecnologías más antiguas.
El 7D tiene un punto focal más pequeño que otros dispositivos HIFU. Como resultado, el ultrasonido concentrado de alta energía transfiere la energía con mayor precisión a la capa de tejido cutáneo objetivo, lo que produce un efecto de coagulación térmica sin dañar los tejidos circundantes.
Esta energía enfocada, mientras estimula la proliferación de fibras de colágeno y elastina, mejora dramáticamente la comodidad y le da una gran apariencia con una piel sana, firme y elástica.
La tecnología 7D ofrece mejores resultados que los dispositivos HIFU más antiguos y posee una potencia extraordinaria. Los efectos de la terapia HIFU en este caso duran de uno a dos años, y la producción de colágeno en la piel será mayor. Si bien el cliente suele sentir cierta incomodidad al realizar la terapia HIFU con dispositivos más antiguos, la tecnología 7D es mucho menos dolorosa y también mucho más rápida en comparación.
El dispositivo 7D utiliza energía ultrasónica para tensar la piel y reducir la grasa no deseada en ciertas zonas. En este proceso, la energía se concentra y penetra profundamente en las capas de la piel, generando efectos térmicos (calor).
La energía ultrasónica se concentra en el dispositivo 7D y se dirige a un pequeño punto focal de la piel. Esto aumenta la producción de colágeno y elastina, así como la degradación de las grasas.
El colágeno y la elastina son los principales factores que rejuvenecen la piel. Estas ondas no dañan la piel ni el tejido circundante, sino que rejuvenecen el tejido afectado. Como resultado, los dispositivos 7D pueden actuar sobre las capas profundas de la piel para tensar y rejuvenecer el rostro sin agujas ni cirugía.
¿Qué es mejor? ¿RF o HIFU?
El HIFU y la radiofrecuencia utilizan diferentes tecnologías para calentar los tejidos profundos de la piel. El estiramiento cutáneo con HIFU aplica energía ultrasónica más precisa e intensa a la capa SMAS, mientras que la radiofrecuencia funciona con una estrategia de calentamiento masivo.
El HIFU penetra mucho más profundamente en la dermis y la trasciende, alcanzando la capa SMAS. La radiofrecuencia no puede llegar tan profundo como el HIFU. La radiofrecuencia fraccionada se centra en las capas de la epidermis y no trasciende la dermis profunda. Por ello, el HIFU se considera mucho más eficaz que la radiofrecuencia.
El HIFU puede realizarse en una sola sesión, pero la radiofrecuencia puede requerir varias. El número exacto de sesiones necesarias para cada tratamiento depende del tipo de dispositivo utilizado, del estado de su piel y de su genética.
El uso de energía ultrasónica en procedimientos de belleza es una práctica relativamente nueva. Si bien la radiofrecuencia se utiliza desde hace mucho tiempo para el rejuvenecimiento facial y el reafirmado de la piel.
Antes y después
